En muchas ocasiones al buscar la aprobación de una hipoteca nos plateamos una pregunta básica, que tipo de tasa hipotecaria voy a elegir, ¿Tasa Fija? o ¿Tasa Variable?
¿Cuál será la mejor opción?
Es importante siempre soportar nuestras decisiones en información confiable y con el apoyo de especialistas en el área.
Justamente en estos tiempos que estamos presenciando alzas importantes decretadas por el Banco de Canadá para combatir la inflación creciente, esta pregunta es muy pertinente.
El punto central no es solamente la ventaja económica, una tasa fija otorga seguridad y confianza al cliente, que puede planear con certeza en el mediano plazo de 5 años y saber cuanto va a estar pagando por su hipoteca.
En el caso opuesto una tasa variable implica un nivel de riesgo e incertidumbre que es aceptable para ciertas personas, pero no para otras, ambos son válidos y la elección depende de las condiciones y preferencias de cada persona y familia. Sin embargo, es importante que usted sepa que al elegir una tasa variable, también es posible tener pagos mensuales fijos.
Ejemplo: Si el préstamo es de $400,000 y el pago inicial fue de 5% con una tasa variable de 3,3% (contrato de 5 años con el banco), la mensualidad será $1,932. En el momento que la tasa sube, usted estará aportando menos dinero a capital y mas a intereses cuando los pagos mensuales se mantienen fijos.
Otra ventaja es que la penalidad por romper una hipoteca variable es mucho más razonable que las de una hipoteca de tasa fija.
La investigación realizada por expertos económicos canadienses muestra que las hipotecas de tasa variable brindan más beneficios a los consumidores la gran mayoría de las veces.
Moshe Milevsky PhD, profesor asociado de Finanzas de la Universidad de York, en Ontario, estudió los datos de tasas hipotecarias de 1950 a 2007 y descubrió que elegir una hipoteca de tasa variable les habría ahorrado a los canadienses $20,000 en pagos de intereses durante 15 años, con base en una hipoteca de $100,000.
También descubrió que los canadienses habrían estado mejor con una hipoteca de tasa variable en comparación con una tasa fija a cinco años en el 89 por ciento de las veces.
Veamos esta gráfica histórica de los últimos 16 años comparando las tasas fija y variable desde 2006, a partir de la gran recesión de los años 2008-2009 que bajaron drásticamente y ahora que empiezan a subir en casi todo el periodo las tasas variables han sido menores, salvo un muy corto periodo en 2019.
Línea AZUL Tasa fija contrato a 5 años
Línea ROJA Tasa variable contrato a 5 años
La tasa fija da una cierta tranquilidad y seguridad pero esto tiene un costo, quien se sienta cómodo con un mayor nivel de riesgo es preferible económicamente en la mayor parte de los casos elegir una tasa variable.
Cada caso individual, cada familia debe tomar su propia decisión con información clara y el consejo de especialistas de confianza.